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¡Qué grande es el turf! (por Dancing Brave)
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Foro A Galopar & Turfinternet, 26/12/2005
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Tras estos meses de carreras en Madrid, de leer o releer libros y
revistas, y revisar videos y DVDs, vuelvo a soñar con las carreras de
caballos, buena señal.
De nuevo vuelve a mi imaginación el placer inagotable del turf.
Bendito seas por siempre.
Y como está llenos de momentos mágicos y legendarios, y estamos en
fechas propias de leyendas, me voy a poner a recordar algunos de mis
favoritos. Aunque son tantos...
"You´ll need a telescope to see the rest..." decía el gran
Peter O´Sullevan cuando aún quedaban 200 metros para la llegada del
Derby de Epsom de 1981, pues tal era la superioridad de Shergar sobre el
resto de sus rivales, que efectivamente los prismáticos no eran
suficientes. Se quedaban cortos. Otro gran Peter, Bromley en este caso,
comentarista de la BBC Radio, pasó algún momento de apuro, en esa misma
prueba, mientras los caballos galopaban por la recta de enfrente. Quienes
hayan estado en Epsom saben que ir allí sin prismáticos es como ir a
esquiar sin esquíes. Pues bien, el bueno de Mr. Bromley los dejó
olvidados en su casa... ¡en el Derby Day!. Ante tamaño despiste, se
centró en el galope del del Aga Khan, y por suerte para él, justificó
su inmenso favoritismo al irse a ganar por 10 cuerpos, distancia nunca
superada por ningún otro caballo en la magna prueba.
Cruzó ese poste, el mismo que el legendario Federico Tesio vanagloriaba (The
thoroughbred exists because because his selection has depended not on
experts, or technicians, or zoologists, but on a piece of wood: the
winning post of the Epsom Derby), con una ventaja imperial. Majestuoso el
hijo de Great Nephew; como cuando en el mes de julio de ese mismo 1981
pulverizó a los seis ¿rivales? que intentaron hacerle frente en el King
George. Una lástima su posterior derrota en el St.Leger, pero la
distancia pudo con él. Tan inesperada fué, que incluso apareció en la
portada de varios diarios británicos, igual que cuando ya estaba como
semental en Ballymany unos mal nacidos del IRA lo secuestraron y más
tarde asesinaron. Maldita sea su estampa.
Derrota histórica también la de Brigadier Gerard ante Roberto en la
Benson & Hedges Gold Cup, actual Juddmonte International. Hay cosas en
la vida que aunque tuviéramos 3000 diccionarios para ayudarnos,
seguiríamos sin explicarnos. Cierto que Roberto era un muy buen caballo,
pero el Brigadier era el jefe, el crack, el ídolo que a todos enamoraba.
¡Pero perdió por dos cuerpos! Ni siquiera John Hislop o el Mayor Hern
fueron capaces de encontrar una explicación convincente, esa excusa que
todos los aficionados querían oir, para aferrarse a ella como a un clavo
ardiendo.
Cuentan las crónicas que aquel día en York se derramaron más de una y
más de dos lágrimas. Pero races are races. Y el caballo estuvo batido en
toda regla. Quizás aquél día demostró, simplemente, que él también
era mortal. Todos los análisis que se le hicieron tras la prueba lo
único que certificaron es que no padecía nada. Luego corrió una sola
vez más: venció el Champion Stakes. El Juddmonte fué su única derrota,
su único lunar. Un eclipse.
Aunque otro Eclipse, el que nació en 1764 durante un eclipse solar, de
ahí su nombre, está considerado como uno de los tres mejores caballos de
todos los tiempos. ¿O sería Ormonde? ¿Quizás St.Simon? El caso es que
el primero de los citados era invencible. Ganó sus 18 actuaciones, y
sobre una distancia media de cuatro millas (casi como el legendario Grand
National), nunca vió la grupa de ningún otro ejemplar, venciendo en
todas sus carreras por una distancia no inferior a 200 metros. De ahí se
acuñó la frase "Eclipse first, the rest nowhere", que luego
tanto se ha empleado sustituyendo su nombre por el de otro caballo (Shergar
entre ellos). El caso es que la frasecita en cuestión se la inventó el
jugador profesional Dennis O'Kelly, que ganó tanto dinero con el caballo
que acabó comprándolo. Su criador había sido el Duque de Cumberland,
general del ejército inglés. Tipo con mala fortuna pues crió a Eclipse
y falleció en 1765, por lo que no pudo comprobar lo que su más preciada
obra fue capaz de hacer. Sus logros en la yeguada fueron incluso
superiores, pues unos 230 años después, aún se puede afirmar que un 90
o 95% de los caballos de carreras portan ADN procedente de aquél
campeonísimo. En este foro hay gente mucho más cualificada que yo que
podrá corroborarlo.
La cría de purasangres. Ese mercado que genera miles y miles de millones
y que quieren intentar controlar o dominar los dos grandes imperios del
turf mundial actual: Coolmore y Godolphin. Éstos árabes parece que han
venido desde el desierto a reclamar lo que es suyo. "Si Byerley Turk,
Darley Arabien y Godolphin Arabian son los "padres" de los
actuales purasangres de carreras, ahora nos toca llevarnos nuestro pedazo
del pastel". Eso parece que piensan. Y con sus espaldas bien
cubiertas por un colchón de oro negro, y multimillonarias adquisiciones,
han montado un tinglado como para echarse a temblar. Es curioso que, sin
embargo, haya una prueba que persigan con ahínco infinito, y todavía se
les resiste: el Derby de Kentucky. El propio Sheikh Mohammed ha dicho que
es su sueño el ganarlo. Se ha convertido en una obsesión personal, en su
último gran reto. Pero nada: la paloma se le escapa al halcón. Y encima,
su más directo rival, Coolmore (Michael Tabor para ser más preciso) lo
ha conseguido ya. Sus colores triunfaron con Thunder Gulch. Y al jeque no
le gusta perder ni a las chapas. Y menos contra sus archi-rivales. En seis
años lleva gastados más se 120 millones de dólares... ¡sólo en
potenciales ganadores de la prueba de las rosas!. Pero todavía no sabe
qué se siente al entrar en el Winner´s Enclosure de Churchill Downs.
Cuentan expertos del turf americano como Wayne Lukas o Bob Baffert (sólo
con pronunciar sus nombres se impone un respeto infinito), que el problema
no son los caballos o el dinero, sino la forma que tienen de preparar la
gran carrera. Sus ejemplares se vana Dubai durante el invierno y corren
muy pocas preparatorias en los EE.UU. contra potenciales enemigos del
primer sábado de mayo. Y claro, esa diferencia parece que marca la
frontera entre el éxito y el fracaso, según los doctos del otro lado del
Atlántico. Pero Mohammed Bin Rashid al Maktoum sigue erre que erre, como
el personaje de una película española de los años 60. Dice que cuando
lo consiga, que supongo será cuestión de tiempo, lo habrá logrado a su
manera, contra los cánones establecidos por las mentes más preclaras del
turf norteamericano. El tiempo dirá.
Poco tiempo fue el que tardaron, sin embargo, en triunfar en otro Derby,
el Derby por excelencia: el de Epsom. La victoria de Nashwan en 1989, con
los colores de Hamdam al Maktoum, fué sencillamente apoteósica. Por
cierto, último caballo que hizo el doblete 2000 Guineas-Derby. Parece tan
lejano ya... De la Triple Corona, mejor ni hablar. Y con la
especialización que se da en la cría de hoy en día... Si algún otro
caballo después del gran Nijinsky la vuelve a conseguir, será un hito
que a día de hoy me parece una quimera. No, no me he olvidado de la
grandiosa Oh So Sharp, que en el 85 consiguió la de yeguas. Me refería a
la de los machos.
Pero volviendo al galope de Nashwan, había algo raro, misterioso, en la
acción del hijo de Blushing Groom y Height of Fashion. Parece que apenas
rozaba la hierba, los cascos prácticamente volando, un tranco
esplendoroso, rebosando clase, con un encanto especial. Ya digo, un tanto
sibilino. En aquel Derby pulverizó a sus rivales sin contemplaciones para
darle al gran Willie Carson su penúltimo Derby. El pobre Cacoethes, que
era un buen caballo sin duda ninguna, parecía un simple jaco de segunda
parte. Cuando se enfrentaron de nuevo en el King George, en un día
asfixiante de calor, con 35 o 36 grados allí arriba en Berkshire, Guy
Harwood dijo que su caballo era mucho mejor de lo que había mostrado en
la clásica celebrada en Surrey. Aun así, los aficionados barruntaban,
desde días antes de la carrera, que los diamantes tenían el destino ya
marcado: se iban dirección Dubai. Cuando a 400 metros de la meta Top
Class molestó a Nashwan, debido al cansancio del primero (se llegaron a
tocar), y cacoethes tenía pista libre por fuera, se temió lo peor. Pero
el gigantesco alazán no dió su brazo a torcer, y tras una recta
memorable, venció por un cuello. Todos en la grada habían alzado su voz
al unísono para animar al invicto campeón de Handam. Luego sólo puedo
ser tercero en el Niel, bien batido por Golden Pheasant y French Glory, y
las mieles de un hipotétci triunfo en el Arco se esfumaron. Se lesionó
preparando el carrerón parisino por excelencia. Ese año venció Carroll
House, con Mick Kinane en la silla, al que Nashwan había batido por once
cuerpos en Ascot. Ay, el destino...
El destino, el tiempo. El tiempo, ese que dicta la inevitable sentencia de
la Historia. Y la Historia, con sus mágicas leyendas. Y de leyendas saben
mucho en Coolmore. Que se lo pregunten a Footstepsinthesand. Curioso el
nombre del ganador de las 2000 Guineas de este año que está a punto de
terminar.
Una noche un hombre tuvo un sueño. Soñaba que iba andando por una playa
con Dios a su lado. En el cielo se sucedían, a toda velocidad, imágenes
de su vida. Por cada escena, notaba que había dos pares de huellas en la
arena: uno era suyo, el otro del Señor. Cuando la última escena
apareció frente a él, miró a la arena que estaba ya a sus espaldas. Y
vió que durante algunas partes de su vida había un solo par de huellas.
Que precisamente conincidían con los momentos más duros y tristes de su
existencia. esto le perturbó, así que preguntó a Dios: "Señor,
una vez me dijiste que una vez que había decidido seguirte, caminarías
junto a mi durante todo el camino. Pero he notado que durante todos los
peores trances de mi vida, hay un solo par de huellas. No entiendo porqué
cuando más te necesitaba, me abandonaste". A lo que el Señor
respondió, "Mi amada criatura, te amo y nunca te abandonaría.
Durante tu época de sufrimiento, cuando ves un solo par de huellas, era
porque te llevaba sobre mi".
Una verdadera lástima la lesión del hijo de Giant´s Causeway y
Glatisant. Sus responsables lo tenían en muy alta estima. "He was a
monster", ha dicho Kieren. Pienso que sin tan inoportuna lesión
hubiera estado peleando con Dubawi, Starcraft o Divine Proportions por las
grandes pruebas de la milla. Desde luego contaba con un tranco amplísimo
y poderoso, tal y como lo desplegó sobre las ondulaciones de la Rowley
Mile: "Footstepsinthesand displays his giant stride on the turf of
Newmarket to land the Guineas", dijo John McGrath en la BBc cuando la
montura de Fallon cruzó la meta batiendo a Rebel Rebel. Más atrás
quedaron múltiples ganadores de Grupo posteriormente en la temporada,
como Oratorio, Dubawi o Democratic Deficit. Si el de Godolphin no hubiese
pegado semejante bandazo hacia su izquierda, creo hubiésemos visto una
llegada apretada, pero el caso es que el bautizado por la leyenda galopó
victorioso hacia el poste de llegada y más allá, en las interminables
praderas que rodean a la capital del turf.
Hijo de Giant´s Causeway, ni más ni menos. El semental que cuanta con un
canon de cubrición de US$300.000. Una propinilla... Y que por cierto,
también cuanta con un nombre proveniente de una famosa leyenda, muy
conocida en Irlanda y Escocia. Existe un arrecife de rocas, un conjunto de
ellas, completamente aisladas en medio del mar, en la costa nordeste de
Irlanda, en el condado de Antrim, frente a las costas que separan a la
nación de la Guinness de la del whisky. Siendo Irlanda, hay varias
versiones de la leyenda, aunque ninguna de ellas particularmente
plausible. Una dice que es todo lo que queda de una calzada o paso
construido entre las dos naciones para que dos gigantes pudieran dirimir
su eterna duda: quién era el más fuerte. También puede ser que sea un
fenómeno completamente natural, formado cuando el basalto se enfrió en
el agua del mar, creando aquel extraordinario montaje de columnas. Pero
esto último no se lo creen ni en Irlanda ni en Escocia...
El caballo de hierro fué un auténtico gigante de las pistas, y su
carrera como semental ha empezado de una forma brillantísima. ¿Os
suenan, aparte del de las huellas, Maids Causeway, Shamardal, First
Samurai, Diamond Omi, Naissance Royale, Aragorn, Frost Giant o Mona Lisa,
por citar sólo a los más destacados? También se podría mencionar a My
Typhoon, Aischa, Noble Causeway... En fin, una lista impecable. bien
podría ser el próximo Sadler´s Wells, pero no podemos olvidarnos de
otro que también ha comenzado su nueva vida en la yeguada de manera
espectacular, o incluso mejor que él: Montjeu. ¡Vaya pareja! Y High
Chaparral está aún por llegar. Aunque yo, y esta es una opinión fundada
simplemente desde el corazón, diré que el próximo semental de
sementales, será un caballo al que tengo en gran estima por un motivo
personal: Galileo. Para el tema de la cría se necesita una paciencia
enorme, así que una vez más será el tiempo quien nos diga.
Fué en 2000 cuando "The Iron Horse" nos enamoró en la pista.
Peleaba como nadie, entregando hasta el último átomo de energía en la
lucha. ¡Qué carrerón aquél Coral Eclipse contra Kalanisi!. El del Aga
Khan llega a pasarle, pero quizás el Gigante, urgido por sus ancestros
desde las profundidades marinas, se negó a claudicar. Hubiera sido una
derrota demasiado dolorosa para sus ascendentes, y decidió volver con
toda su furia sobre Kalanisi, para doblegarle en el último suspiro, con
el cuello tan estirado como le era posible. Mágico, legendario. Para mi,
la carrera más bonita de aquel año. En el Queen Elizabeth II, llega el
duelo contra Observatory. El mismísimo Khalid Abdullah, zorro viejo en
estas lides, y que de purasangres sabe un rato, fué quien le dió las
instrucciones a Kevin Darley. Parece ser que le ordenó que cuando lanzara
su ataque sobre el alazán propiedad de Magnier, lo hiciera por el
exterior de la pista, porque si lo hacía en las proximidades de Giant´s,
y éste le veía, lucharía cóntra él a brazo partdo, y terminaría por
batirle. La experiencia decía que en la lucha cuerpo a cuerpo, cabeza
contra cabeza, el panorama sería más halagüeño para el hijo de Storm
Cat y Mariah´s Storm (cuánta tormenta, como en los mares del norte...).
En fin, que Darley cumplió con su papel a la perfección, y la película
le salió a la perfección a todo el equipo del príncipe saudí. El de
Abdullah derrotó al de Magnier por un cuello tras una carrera
excepcional, brillante, eléctrica. Después vino la derrota ante Tiznow
(otro carrerón) en la Breeder´s Cup Classic, quizás por aquél
involuntario error de Kinane de perder las riendas a menos de 100 metros
de la línea de llegada...
Aquél año 2000 fué mágico. ¡Vaya generación la nacida en 1997!
Giant´s Causeway, Sakhee, Beat Hollow, Observatory, Marienbard... y el
gran, grandísimo, inconmensurable Sinndar. Un titán de las pistas. Le
retiraron en el mejor momento de su vida (ay, Aga), tras una portentosa
exhibición en el Arco (y detrás Egyptband, "nuestra" Volvoreta
y Montjeu. Uff...). ¿De qué hubiera sido capaz en 2001? Tendremos que
conformarnos con imaginarlo. Yo creo que estaría con los Dioses del turf
en el Olimpo, con los campeonísimos de años ha.
Con los que me gustaría que también estuviera Hurricane Run cuando se
retire. Estoy convencido de que el primer domingo de octubre de 2006 se
hará historia en Longchamp, y será el primer caballo en ganar el Arco
dos años consecutivos desde que Alleged lo consiguiera en 1977 y 1978. 28
años son más que suficientes. Y las estadísticas están para romperlas.
Sólo pido que las lesiones le respeten. Habrá que estar atentos para
cuando se pueda empezar a apostar para la gran prueba francesa.
Uff... qué pasada. Y también tenemos a Horatio Nelson, George
Washington, Rumplestiltskin, Sir Percy... Ya tengo la piel de gallina para
este 2006.
En fin, que le voy a dejar aquí porque me he enrollado sobremanera. Mejor
retomar el tema en unos días.
Y como sigo pensando en yeguadas, grandes campeones, los Derbys de Lester,
la pugna entre Magnier y Ferguson a propósito de "The Rock",
Fallon y Frankie, Young Tiger y Fol Parade, las subastas de Keeneland o el
remate de Lammtarra en el Derby del 95 ("Lammtarra´s coming from
another county", como dijo el comentarista), ya volveré a dar el
tostón con alguno de estos temas.
Mientras tanto, que disfrutéis todos lo máximo que podáis durante las
Fiestas Navideñas.
Pues eso: que parafraseando en el título de este ladrillo el programa que
presenta un grande, en este caso del cine, Turf...¡qué grande eres!.
Saludos al foro.
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